sábado, 11 de mayo de 2013




yo no soy una persona.
Yo soy un hogar.
Si me observas bien de frente
soy una puerta abierta.
Mírame de perfil -cualquier perfil
que pueda tener-
y ves bien mi generosidad 
hospitalidad y buen ambiente.
Pero como todo hogar tengo algo inoportuno:
Si me miras desde atrás 
verás claramente
que mi timbre se averió hace años.



un pedacito de amor
no se compra con dinero
No se compra con dinero
un corazón

Allí donde estés yo te lo llevo.

Buscarte y encontrarte
no se compran con dinero

Dime dónde estás Amor.

Allí donde estés yo te lo llevo.



nada es más rápido que el viento.

Sólo una mirada de una mujer 

podría serlo cuando te lo dice todo,
Un cuerpo de mujer visto desde atrás
con su cuello fino delicado y claro
que más que carne parece viento.

Nada es más claro y rápido que el viento.


Ni siquiera un muchacho en un columpio
ni una Barbie con Ken de viaje en su sidecar.
Todos los niños juegan a ser más rápidos 

que el viento pero cuando los niños abandonan 
el parque el viento sigue jugando.

Quien pare al viento ya no podrá contarlo.
Ni una mujer, ni mucho menos un niño.

Quién va a parar al viento 

sino los muertos que creen que han sido ellos
quienes han llegado primero.

¿Será el viento quien hace girar la tierra?
¿Será el viento quien nos lleva hacia la luz?

Es el viento quien no permite mortales.