miércoles, 9 de julio de 2014




abre la puerta, la única puerta 
que dejas cerrada 
hasta que, sin compromiso, 
vuelves dando la espalda 
a tus quehaceres de cada tarde, 
en forma de flor, de nube caliente.
Coloca aquí tu mano, que este 
es mi pecho. Mujer no madre 
de la culpa de estar triste, 
de estar triste y no advertirlo, 
y deja que cure tus heridas.



sin un promedio
que llevarse a la boca
porque no es cálculo
ni ortografía 
ni alimento. Esta es la manera 
de decir que te quiero. 
Así se dice:
                    Sin iracundos sobresaltos 
                    de palabra ornamento

composturas
                    que porfían en vano. Mi cama
lo sabe
que mana caricias

         y las arruga

porque así vuelves.
                    Porque puedes tirar del hilo

que hay un extremo,
mi pelo negro
que no se rompe.

Esta es la manera de decir
que te quiero. Sólo 
si me he anticipado a tu sangre
y te he visto
                    desde adentro.