has caído al pozo,
miras mucho hacia arriba, no ves la luz.
No llegan los brazos salvadores
y la voz no te alcanza. Bastaría
con aflojar la soga que te oprime la garganta,
a veces nos dañamos más
con ese afán por mantener los ojos cerrados
que si de pronto los abriéramos
y enfrentáramos por lo que es, la linea del horizonte.
miras mucho hacia arriba, no ves la luz.
No llegan los brazos salvadores
y la voz no te alcanza. Bastaría
con aflojar la soga que te oprime la garganta,
a veces nos dañamos más
con ese afán por mantener los ojos cerrados
que si de pronto los abriéramos
y enfrentáramos por lo que es, la linea del horizonte.
Has caído al pozo y tienes pensamientos de río.
Quieres estar muerto como el río. Buscas el poema.
Quieres estar muerto como el río. Buscas el poema.
Cada vez que pides perdón estás intentando
justificarte, si vas a explicarlo todo todas las veces
entonces lo que estás haciendo no vale para nada.
Te desvives por morir, y aunque
están podridos los cristales de todas las ventanas,
todavía suspiras y sabes que ese suspiro
es el animal doméstico de la esperanza.
justificarte, si vas a explicarlo todo todas las veces
entonces lo que estás haciendo no vale para nada.
Te desvives por morir, y aunque
están podridos los cristales de todas las ventanas,
todavía suspiras y sabes que ese suspiro
es el animal doméstico de la esperanza.
Soy yo, el cobarde,
el que no lucha por la mujer que ama.
el que no lucha por la mujer que ama.